La Secretaría de Desarrollo Social del Municipio de Río Grande realizó el balance anual de la cartera, destacando el exponencial incremento de la demanda que experimentó la asistencia alimentaria durante la pandemia y la fuerte presencia territorial lograda a través de la articulación con organizaciones de la sociedad civil, en sintonía con las políticas implementadas a nivel nacional.
Según un informe emitido por la Secretaría de Desarrollo Social del Municipio, a cargo de Silvana Angelinetta, el Estado municipal incrementó en un 400% la asistencia alimentaria de emergencia, dada a demanda espontánea, durante el segundo trimestre de gestión. Esto se da en el marco de una decisión política del Intendente Martín Perez y su equipo de fortalecer las vías de acompañamiento y contención en el contexto adverso dado en el 2020 por la pandemia.
Se sostuvo sistemáticamente el aporte alimentario mensual en entrega de módulos a grupos familiares en padrón, según el “Programa Alimentario Municipal”, a lo cual se sumó la demanda espontánea de emergencia; la asistencia a organizaciones sociales; a instituciones, agrupaciones y asociaciones; la demanda de adultos mayores y de familias con miembros con alguna discapacidad, con una cobertura que alcanza a más del 25% de la población estimada para nuestra ciudad.
Paralelamente, la secretaria de la cartera destacó el gran trabajo territorial que se desarrolló a través de la Dirección General de Fortalecimiento Institucional y Abordaje Territorial, en conjunto con las más de 60 organizaciones sociales de la ciudad que brindan servicio de comedor y/o merendero comunitario, con el apoyo desde la Secretaría de Inclusión Social del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, a través de la Dirección Nacional de Fortalecimiento Institucional y el Centro Nacional de las Organizaciones de la Comunidad (CENOC). Asimismo, subrayó el trabajo articulado junto al Concejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, con al Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat y también con la Secretaría Nacional de Derechos Humanos; destacando que la transversalidad de las planificaciones se dieron junto a otras secretarías municipales.
Cabe señalar que, según un relevamiento de la Secretaría, el Municipio trabaja con el 85% de las organizaciones en distintos sectores de la ciudad brindando asistencia alimentaria a vecinos y vecinas en situación vulnerable, de los cuales el 39% de los receptores son niñas, niños y adolescentes. Por otro lado, es importante resaltar que los aportes alimentarios desde el Municipio comprenden alimentos de almacén, frutas, verduras, pollos y carnes. Aportes que se han fortalecido a través de diversas articulaciones, tales como las sostenidas con la Secretaría de Desarrollo Económico y Ambiente, a través del Programa de Carne Porcina y la articulación con productores pecuarios; y con la Secretaría de la Mujer, Género y Diversidad. Aportes que no solo fueron alimentarios, sino que también implicaron recursos materiales, profesionales y de asesoramiento.
También se acentúan en el informe las acciones llevadas a cabo en colaboración con el programa municipal ‘RGA Solidaria’, en la entrega de elementos de primera necesidad tales como abrigo, alimentos, y el trabajo de contención social brindado a personas en situaciones que ameritan accionar de manera expeditiva. Además, la entrega de colchones, sábanas, frazadas y pañales, entre otros artículos necesarios y actuaciones de ayudas directas varias, en pos de mejorar las condiciones de vida a grupos familiares que requerían de un estado municipal presente.
Esta gestión, en este año más que particular y dónde se evidenció que la necesidad se manifiesta de distintas maneras, aumentó 100% la cantidad de Becas RGA destinadas a estudiantes de nivel superior, el 83% de los becarios son estudiantes de instituciones públicas, el 70% estudia en la ciudad, mientras que el 75% la reciben mujeres.
Finalmente, en el informe se detallan las acciones llevadas adelante en relación a los Adultos Mayores, uno de los grupos más sensibles a la pandemia, con quienes se trabajó en recomendaciones sobre las medidas de prevención y cuidado; asesoramiento y guía a familiares y referentes responsables del cuidado de adultos mayores; aplicación de vacunas a domicilio y confección de recetas, trabajo en articulación con la Secretaría de Salud RGA; compra de medicamentos; solicitud y entrega de leña, en articulación con la Secretaría de Gestión Ciudadana; otorgamiento de kits de higiene personal a personas en situación de vulnerabilidad socioeconómica o de escaso andamiaje de contención; entre otras acciones; lo que implicó más de 9.000 respuestas a distintos requerimientos.